Ir al contenido principal

Media Maratón de Madrid: reto superado

Lo conseguí. I did it. El domingo 8 de abril de 2018, cumplí un sueño que se me había metido entre y ceja hace 2 años: correr la media maratón de Madrid, y a ser posible no morir en el intento ;-).

La idea surgió hace 2 años, cuando empecé a estar desmotivada en el trabajo y vi que necesitaba marcarme un reto para recuperar la fe en mi misma. Pero no ha sido hasta este año pasado, cuando me cambió la vida al salir de mi empresa, cuando pude empezar a construir mi sueño.

Tras una etapa de inicial de pánico, miedo y sensación de estar delante de un abismo desconocido (han sido 11 años en la misma empresa y 13 desde que me licencié y empecé a trabajar), conseguí aceptar mis nuevas circunstancias y descubrir el gran regalo (y gran responsabilidad) de poder reinventarme y hacer lo que quisiera. Con mi tiempo, con mi vida. 

Y este proceso han sido mi familia, sobre todo mi marido (que ha sido mi apoyo y motor cada día) y mi prima Bea (que ha sabido escucharme, cual terapeuta en su diván); mis amigos (que me han apoyado sin juzgarme), y muchas personas maravillosas que me he encontrado en el camino (gracias Iván), las que me han dado y me dan la fuerza para seguir buscando mi por qué.
Y el deporte. Correr.

Empecé a correr hace 4 años. Entonces no aguantaba más de 5 km. Vino mi tercer hijo. Lo dejé. Y hace 2 años empecé de nuevo. Esta vez, era mi rodilla (la cintilla isiotibilal, para ser más exactos) la que no me dejaba pasar del kilómetro cinco. Se me junto con la etapa "mala" del trabajo. Lo dejé. Aunque seguía haciendo deporte para mantenerme fuerte.

22 de Agosto 2017. Me echan del trabajo. Me marco un reto: correré mi primera media maratón.

9 de septiembre de 2017. Llamo a mi amigo Óscar, fisio (de los buenos!). Le cuento que ahora que voy a tener tiempo, quiero empezar a correr y prepararme para la media. Dos sesiones después ya no tengo molestias en la rodilla. Me manda un entrenamiento de fuerza (piernas, "core") y que empiece a correr. Poco a poco. Escuchando al cuerpo. Sin reloj. 

1 de octubre de 2017. Empiezo mi plan de carrera, en paralelo a mi nuevo plan de vida (vuelvo a ser estudiante... quiero ser docente y hasta tengo mi propio blog https://diariodeunanovatadocente.blogspot.com


Han sido 6 meses de entrenar, de estar con y para mi familia, de salir de mi zona de confort para probar cosas diferentes y conocer gente nueva. Sé que muchos estáis pensando, ¿con qué dinero? Pues reduciendo gasto (que mi me costaba ir a trabajar casi 350€ al mes entre coche y ayuda para llevar a los niños al cole por las mañanas..) y tirando de ahorros. En casa lo hemos planteado como una inversión a corto plazo: 1 año para formarme y probar.

Nada pasa por casualidad, si no por causa-lidad. Todo lo que he hecho hasta ahora me ha traído hasta aquí, hasta este momento. Además, soy creyente. Y sé que para recibir, hay que dar primero. Tu tiempo, tu dinero...cada uno lo que pueda.

Hace poco leí "The most successful people are the ones who start giving right from day one." Y lo dice Adam Whart, profesor de la prestigiosa Wharton School de la Universidad de Pensylvannia. Os dejo el link al video donde lo explica en 3 minutos: 
the-power-of-the-five-minute-favor

Espero que os guste ;-)

Comentarios

Entradas populares de este blog

Los impresentables

8.45 de la mañana. Como cada día, voy caminando al cole, feliz y llena de energía con mis 3 hij@s de 3, 7 y 8 años . Es un trayecto de apenas de 1 kilómetro, por una zona residencial y tranquila, que yo me he empeñado en hacer a pie (a veces empujando la sillita de mi hijo pequeño, a veces corriendo detrás de su bici sin pedales) por salud, conciencia ecológica, y por un sinfín de beneficios que nos aporta llegar al cole de forma activa en vez de metidos en un coche . Pero lo que debería ser un paseo tranquilo se convierte,un día sí otro no,en una carrera de obstáculos y peligros por culpa de los IMPRESENTABLES. Porque VALE que las aceras son estrechas y apenas cabe una sillita ( y ya ni te cuento si hay un alcorque/farola/ papelera en medio) y a veces me toque bajarme para poder circular; VALE que si yo, como madre "motivada", me empeño en ir a pie para enseñarles a mis hijos de forma práctica las normas de circulación (en vez de tanto taller teórico de educación v

Los impresentables atacan de nuevo

Mira que no contaba yo hoy con cruzarme en mi camino (al cole) con otro espécimen de impresentable. Y menos, en el mismo lugar y a la misma hora: 8.45;  tramo de calle estrecha-imposible-ir-por-la-acera-con-la-sillita-del-peque. Allí estaba yo, circulando pegadita a la acera para molestar lo menos posible, charlando tranquilamente con mis dos hijas mayores, cuando de repente un chirriante bocinazo de coche nos ha sobresaltado. Me giro y me encuentro con un todoterreno gris, literalmente pegado a mis talones, conducido por una señora (por llamarle de alguna manera sin faltar al respeto) con cara de cabreo, y que gesticula como diciéndome "qué narices hace esta idiota en mi camino, con la prisa que tengo yo". "¿Mamá, qué pasa, por qué nos pitan?"  me pregunta mi hija mayor,  asustada. "Nada hija- respondo yo, haciendo uso de toda mi calma interior- que esta señora  parece que no se da cuenta que tiene que ir despacito y esperar a que yo tenga